Dentro de la amplia gama de bizcochos que existen, este es uno de los que más me gustan y es, cómo no, porque lleva leche condensada. A estas alturas estoy seguro de que ya se ha convertido en uno de los ingredientes favoritos de tod@s. Está tan buena que se puede comer a cucharadas así que imaginad lo que puede hacerle a un bizcocho. Otro nivel amig@s, lo eleva a otro nivel. El pedazo de bizcocho que veis en las fotos duró en mi casa 2 días y si hubiera sido más grande, lo mismo. Ahora os dejo la receta para que la hagáis en casa y sorprendáis a tod@s con un delicioso bizcocho.
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Comenzamos batiendo los huevos con el azúcar durante 6-7 minutos, hasta que se hayan convertido en una masa blanquecina que ha aumentado muchísimo de tamaño. Pasado ese tiempo le ponemos la leche condensada y una vez integrada añadimos la leche.
Paso 2
Ahora vamos añadiendo la harina mezclada con la levadura cucharada a cucharada, mientras batimos a una velocidad mucho más baja que antes. Cuando se haya mezclado yodo bien paramos de batir y engrasamos nuestro molde, que en este caso es circular y con agujero en el centro.
Luego vertemos la mezcla en el molde y encendemos el horno a 180 grados centígrados con el calor arriba y abajo.
Paso 3
Con el horno caliente, metemos nuestro bizcocho de leche condensada y lo tenemos cociendo durante 45 minutos aproximadamente.
Paso 4
Pasado ese tiempo, comprobamos si está hecho con la aguja y si sale limpia al pincharlo, ya podemos sacarlo del horno. Ahora solo tenemos que dejar que se atempere un poco para desmoldarlo y esperar que se enfríe para comerlo.
Paso 5
Hasta aquí la receta de hoy amig@s, espero que disfrutéis mucho con este bizcocho de leche condensada.
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fuente: Javier Romero